Antes de empezar a cocinar tenemos que tener en cuenta que cuando comemos cannabis, el efecto tarda al rededor de una hora en llegar y que cuando llega se queda con nosotros unas 6 horas !!!! por esto hay que tener en cuenta que si seguimos comiendo mientras pensamos que no nos pega, cuando nos empiece a pegar vamos a haber comido demasiado, no te preocupes nos pasa a todos 😉
La primera receta va a ser la de uno de nuestros componentes principales la manteca cannábica, ya que a partir de ella lograremos muchas de nuestras recetas. Manos a la obra.
MANTECA CANNABICA
Los principios activos de la marihuana son absorbidos materias grasas cuando se calientan a 60º C. Se puede extraer más THC y cannabinoides (principios activos del cannabis) con aceite o mantequilla (80%) que con alcohol (40-60%).
Si la manteca la vamos a hacer con las hojas de recorte, es muy importante hervirlas previamente durante al menos 15 minutos, no te preocupes, el THC no se degrada en agua por tanto no lo perderemos. Una vez que haya hervido durante 15 minutos escurriremos las hojas y nos desharemos del agua de hervor que se puso verde por la clorofila cuyo sabor no queremos en nuestras preparaciones.
Ingredientes y utensillos:
- 100g de hoja o 10g de cogollos (aprox. Como cada planta es diferente, las cantidades varían)
- 375g de mantequilla sin sal
- Una olla con 1,5 litros de agua
- Colador o tela de algodón o maya.
- Una fuente con mucha superficie.
- Para 320g. de mantequilla aprox.
Preparación:
- Luego del proceso de lavado, picar los cogollos o las hojas.
- Calentar 1,5 litro de agua.
- Cuando rompa el hervor añadir 100g. de hojas o 10g. de cogollos y revolver hasta tanto quede todo sumergido en el agua.
- Pasados 5 minutos añadir 375g. de manteca.
- Dejar hirviendo 15 o 20 minutos (y hasta una hora si es más cantidad), revolviendo de vez en cuando. Preparar un recipiente y sobre él colar la hierva en caliente ( si, quemándote los dedos, lo que cuesta vale!), lo ideal es hacerlo en porciones usando un tamiz de tela o un colador de maya o un lienzo limpio, prensando lo máximo posible para sacar todo el líquido de las hojas y así extraer toda la manteca que va a terminar en ese recipiente con el agua.
- Hervimos dos tazas más de agua, y las echamos sobre la materia exprimida varias veces para arrastrar cualquier resto de mantequilla y se vuelven ha exprimir… (Los restos ya prensados pueden ser utilizados para hacer leche cannábica… otra historia, otro post ).
- Ahora dejaremos el recipiente sin tapar hasta que enfríe a temperatura ambiente .
- Una vez frío lo metemos en la heladera toda la noche ( no en el freezer, no sean brutos! o_O ), al enfriarse la manteca repleta de cannabinoides, que ya va a estar flotando sobre el agua ( como si fuera aceite 😉 ) se solidifica en la superficie del agua.
- 8 horas mas tarde veremos una capa como de manteca verde sobre el agua, metemos el dedo por un costadito como para apenas romper esa superficie y tiramos por el agujero que dejamos todo el liquido de abajo.
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| Revolvemos la manteca y las hojas o los cogollos picados |
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| Revolvemos cada tanto |
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| Después de 8 horas en la heladera se separa y solidifica sobre el líquido |
Eso que nos quedó en el recipiente es la famosa manteca cannábica. Lo ideal sería meterlo en un taper ( recipiente plástico con tapa ) y así nos durará hasta mes y medio en la heladera ( como si la fuéramos a dejar tranquila tanto tiempo jajajaj )
En el próximo post les agrego algunas recetas para usar esta deliciosa manteca.
Salute y Paz
~Ener1
Cultivando y enseñando luchamos contra el narcotráfico.
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