La cantidad de bacterias viviendo en el suelo en el que cultivamos suele ser muy numerosa. Hay especies que nos benefician como el Azospirillium, el Rhizobium o el Azotobacter ya que aportan minerales a nuestras raíces, toman el nitrógeno que está en el aire y lo transforman en nitrógeno amónico. Además al igual que los compuestos de hongos, ocupan un lugar que de otra manera podrían ocupar bacterias que no queremos cerca de nuestras plantas ni de nosotros!
Los sustratos potenciados con bacterias, suelen dar resultados mucho mejores, con plantas más resistentes y mejores cosechas, dado que gracias a esta simbiosis las plantas terminan consiguiendo más nutrientes del medio en que crecen.
Los lactobacilus nos dan un ejemplo perfecto, estas bacterias descomponen materia orgánica y producen encimas y bactericidas naturales capaces de lidiar con bacterias muy malas como la Salmonella y la E. Coli.
La interacción de estas buenas bacterias presenta muchos beneficios, a saber:
- Beneficio general a la salud de las plantas
- Mejora del sistema inmunitario
- Regeneración de microorganismos benéficos para el suelo
- Mejora en la absorción de nutrientes
- Mejor aprovechamiento de los fertilizantes
- Previenen oídio y botritis
- En suelos enfermos se utiliza para eliminar otras bacterias (generalmente malas)
Los lactobacilus se pueden comprar en farmacias y viveros especializados. Y podemos incorporarlos ya sea en el armado del sustrato o diluido en el riego. Lo ideal es utilizarlo junto a hongos y micorrizas para mantener una buena biodiversidad en nuestro suelo. Si bien son ideales durante todo el cultivo, aplicadas en floración les darán a nuestras plantas mas nutrientes cuando estas más los necesitan!
Salute y suerte
~Ener1
Cultivando y educando luchamos contra el narcotráfico.